Receta de Tarta Pavlova
La tarta Pavlova es un postre ligero y delicioso originario de Australia y Nueva Zelanda. Se compone de una base de merengue crujiente y dulce, coronada con una capa de crema batida y frutas frescas de temporada. La combinación de texturas y sabores la convierte en una opción ideal para cualquier ocasión, desde una cena elegante hasta una reunión casual entre amigos.
El nombre de la tarta Pavlova proviene de la famosa bailarina rusa Anna Pavlova, quien visitó Australia y Nueva Zelanda en la década de 1920. La tarta se creó en su honor y desde entonces se ha convertido en un clásico de la cocina australiana y neozelandesa.
La preparación de la tarta Pavlova es sencilla, pero requiere algo de tiempo y paciencia. El merengue debe cocinarse a baja temperatura durante varias horas para que quede crujiente por fuera y suave por dentro.
Una vez lista, se cubre con crema batida y frutas frescas, creando una presentación impresionante y un sabor irresistible. En esta receta te explicaremos paso a paso cómo preparar la tarta Pavlova para que puedas sorprender a tus invitados con este delicioso postre.
Ingredientes
Cómo hacer Tarta Pavlova
Precalienta el horno a 150 °C.
Separa las yemas de las claras y vierte las claras en el bol de tu batidora. Empieza batir a potencia media-baja y bate hasta que empiece a coger cuerpo. Unos 10 minutos aproximadamente.
Reduce la potencia y agrega el azúcar poco a poco hasta que quede totalmente integrado sin dejar de batir durante otros 10 minutos aproximadamente.
Sigue batiendo hasta conseguir un merengue cremoso, consistente y brillante sin grumos de azúcar. Asegúrate de que este último haya quedado totalmente disuelto.
En un bol aparte, disuelve la maicena en el vinagre. Una vez disuelto, agrega esta mezcla al merengue, sube la potencia y bate durante unos 40 segundos hasta integrar.
Vierte el merengue sobre una bandeja de horno protegida con papel vegetal. Dale forma de tarta con la ayuda de una espátula.
Baja la temperatura del horno a 110 °C y hornea la Pavlova durante 90 minutos. Recuerda no abrir el horno mientras se cocina. Pasados los 90 minutos, apaga el horno y deja que se atempere dentro del horno (6 horas mínimo).
Monta la nata con el azúcar glas y agrega el extracto de vainilla. Por otro lado, transfiere la pavlova a una bandeja o plato y cubre con la nata montada. Decora con las frutas y sirve al momento. Recuerda no guardar la Pavlova en la nevera o congelador, ya que se fundirá el merengue.
Ingredientes
Instrucciones
Precalienta el horno a 150 °C.
Separa las yemas de las claras y vierte las claras en el bol de tu batidora. Empieza batir a potencia media-baja y bate hasta que empiece a coger cuerpo. Unos 10 minutos aproximadamente.
Reduce la potencia y agrega el azúcar poco a poco hasta que quede totalmente integrado sin dejar de batir durante otros 10 minutos aproximadamente.
Sigue batiendo hasta conseguir un merengue cremoso, consistente y brillante sin grumos de azúcar. Asegúrate de que este último haya quedado totalmente disuelto.
En un bol aparte, disuelve la maicena en el vinagre. Una vez disuelto, agrega esta mezcla al merengue, sube la potencia y bate durante unos 40 segundos hasta integrar.
Vierte el merengue sobre una bandeja de horno protegida con papel vegetal. Dale forma de tarta con la ayuda de una espátula.
Baja la temperatura del horno a 110 °C y hornea la Pavlova durante 90 minutos. Recuerda no abrir el horno mientras se cocina. Pasados los 90 minutos, apaga el horno y deja que se atempere dentro del horno (6 horas mínimo).
Monta la nata con el azúcar glas y agrega el extracto de vainilla. Por otro lado, transfiere la pavlova a una bandeja o plato y cubre con la nata montada. Decora con las frutas y sirve al momento. Recuerda no guardar la Pavlova en la nevera o congelador, ya que se fundirá el merengue.
