Receta de San jacobo casero

Hoy denostados por ser considerados viejunos o pasados de moda, los san jacobos vivieron su momento de esplendor cuando formaban parte del menú semanal de cualquier familia española allá por los años ochenta y noventa.
Si bien no podemos considerarlo el plato más equilibrado de la gastronomía española, en Divino Paladar queremos reivindicar el san jacobo como un digno plato a la altura de un buen cachopo, un cordon bleu o unos flamenquines.
El san jacobo consta de dos lonchas de jamón cocido, una capa intermedia de queso y un rebozado de huevo y pan rallado que fríe posteriormente en aceite.
La gran diferencia entre un buen san jacobo y un mal san jacobo es, básicamente, la elección de la materia prima. Así que, si quieres preparar unos san jacobos de 10, no racanees y hazte con un jamón cocido de calidad y un buen queso para fundir. ¿Te animas a prepararlos con nosotros?
Ingredientes
Cómo hacer San jacobo casero
Extiende una loncha de jamón cocido, después coloca una loncha de queso y cúbrelo con otra loncha de jamón cocido. Repite la misma operación con el resto de san jacobos.
Pasa el san jacobo por harina.
Pasa el san jacobo por huevo.
Rebózalo con pan rallado.
En una sartén con abundante aceite, fríe los san jacobos hasta que queden crujientes. Cuando los saques de la sartén, deposítalos sobre una capa de papel absorbente para retirar el exceso de aceite.
¡Buen provecho!
Ingredientes
Instrucciones
Extiende una loncha de jamón cocido, después coloca una loncha de queso y cúbrelo con otra loncha de jamón cocido. Repite la misma operación con el resto de san jacobos.
Pasa el san jacobo por harina.
Pasa el san jacobo por huevo.
Rebózalo con pan rallado.
En una sartén con abundante aceite, fríe los san jacobos hasta que queden crujientes. Cuando los saques de la sartén, deposítalos sobre una capa de papel absorbente para retirar el exceso de aceite.
¡Buen provecho!