La hiperuricemia, también conocida como gota, no es otra cosa que una enfermedad que provoca un exceso de ácido úrico en la sangre. Un mal que en la mayoría de casos está vinculado a la alimentación y que se sufre cuando este ácido no se logra eliminar mediante la micción, quedándose en el sistema sanguíneo.
Este se torna especialmente grave cuando el ácido úrico comienza a cristalizar dentro de la sangre, lo que provoca dolorosas inflamaciones en las articulaciones.
Conocida popularmente como una enfermedad de reyes, por aquello de que a menudo es consecuencia de la ingesta de productos de alimentación nobles, como lo pueden ser el marisco o la carne roja, lo cierto es que su afectación es tremendamente democrática y poco relacionada con el nivel socioeconómico de las personas.
Lo cierto es que esta, eso sí, suele presentarse en personas de mediana edad, tanto en hombres como en mujeres, requiriendo un tratamiento médico que suele empezar alterando de arriba a abajo la dieta.
Dicho de otra manera, introduciendo ciertos alimentos que ayudan a bajar los niveles de ácido úrico en sangre y eliminando aquellos que tienen tendencia a subirla y, por lo tanto, a incrementar los niveles de malestar de los pacientes con hiperuricemia.
Es por eso que si sufres gota es imprescindible que acudas a tu médico de cabecera para que este te derive a un nutricionista encargado de prepararte una dieta personalizada para hiperuricémicos que, ya te adelantamos, tendrá mucho que ver con lo que pasamos a indicarte a continuación:
Qué alimentos suben y bajan el ácido úrico
Antes de ponernos con los alimentos que se convertirán en tu nuevo día a día es casi más importante poner el foco en aquellos alimentos que debes empezar a dejar de lado para mantener a raya tu dolencia y empezar a conseguir que remita.
Alimentos que se deben evitar para controlar el ácido úrico
En general, todos los alimentos que contienen altas dosis de purinas, un compuesto orgánico que las personas con gota no asimilan como el resto generándoles subidas de ácido úrico.
-Mariscos, no importa si están frescos, congelados o en conserva
-Pescados azules, como por ejemplo el salmón, el atún o las sardinas, entre otros.
-Carnes rojas como la ternera, el cerdo, el potro, el buey o el cordero.
-Vísceras de animales en general, como el hígado, las criadillas, los pulmones, la tripa, el corazón o los riñones.
-Embutidos con altos niveles de grasa, como son el lomo, el chorizo o las salchichas, entre muchos otros.
-Las legumbres en todos sus formatos, como por ejemplo las lentejas o los garbandos que deberemos consumirlas en pequeñísimas cantidades.
-Ciertas verduras y hortalizas como las espinacas, los tomates, los puerros o los espárragos.
-Las setas en general.
-Los productos lácteos especialmente grasos, como la leche entera, los quesos curados, etc.
-Los productos ultraprocesados, como la bollería industrial o los congelados.
-Los alimentos deshidratados de sobre.
-Las bebidas altas en azúcar, como las energéticas o los refrescos carbonatados azucarados.
-Las bebidas alcohólicas.
Alimentos que ayudan a rebajar los niveles de ácido úrico
Los dos grupos de alimentos que más ayudan a rebajar los niveles de ácido úrico son las frutas y las verduras, con algunas excepciones como las mencionadas en el apartado anterior.
De entre las frutas, las que más ayudan a controlar los niveles de ácido úrico son:
-Los frutos rojos
-Las frutas silvestres
-Las fresas
-Los arándanos
-Las moras
-Las cerezas
-Las manzanas
-Los cíctricos como la naranja, el limón, la mandarina, la lima o el pomelo
De entre las verduras, las que más ayudan a controlar los niveles de ácido úrico son:
-Las alcachofas, ya sean cocidas, al horno o incluso infusionadas
-Las cebollas, cebolletas y chalotas.
-Las calabazas.
-El apio
-El nabo
-Las zanahorias
-La berenjena
Más allá de las frutas, las verduras y las hortalizas también encontramos alimentos que pueden ayudarte a rebajar tus niveles de ácido úrico.
De entre las carnes, las que más ayudan a controlar los niveles de ácido úrico son:
-El pavo
-El pollo
-El conejo
-Las zonas más musculosas y menos grasas de carnes blancas
De entre los pescados, los que más ayudan a controlar los niveles de ácido úrico son:
-El Lenguado
-El gallo, también conocido como meiga o rapante en algunas zonas de España
-Las merluza
-El bacalao fresco, es importante recordar que tanto las conservas como los salazones deben evitarse
-Los pescados poco grasos, en general
Aunque, como ya hemos revelado más arriba, los lácteos son productos a evitar, lo cierto es que existen algunas excepciones que nos pueden ayudar a mantener ciertos hábitos de nuestra dieta previa que ahora vamos a tener que alterar en busca de una mejora de nuestro problema de hiperuricemia.
De entre los lácteos, los que más ayudan a controlar los niveles de ácido úrico son:
-Las leches sin lactosa, como por ejemplo todas las elaboradas a base de vegetales como la de soja
-Las leches desnatadas 100%
-Los yogures bajo en grasa
-Los quesos light o bajos en grasas
En cuanto a los cereales, destacar que el arroz, uno de los alimentos estrella de la dieta mediterránea, el trigo y derivados como la pasta o el pan, si son integrales, pueden ayudarnos a no disparar los niveles de ácido úrico en sangre.
De igual forma, los frutos secos que no están fritos o el aceite de oliva virgen extra son ingredientes que pueden formar parte de nuestra dieta.
En el bando contrario encontraremos, los frutos secos fritos, las patatas fritas de bolsa, el aceite de soja o de colza, la mantequilla, la nata, la manteca o prácticamente cualquier producto graso.
Más allá de todo lo que podemos o debemos comer y debemos dejar de consumir es esencial saber que beber agua resulta importantísimo para todos, pero especialmente para las personas que sufren gota. Y es que la única forma de eliminar el ácido úrico es a través de la orina.
Por ello debemos prestar una especial atención al consumo de agua diario que vamos realizando y evitar acostarnos sin haber consumido un mínimo de dos litros y medio de agua al día.